Solomillo de cerdo relleno de champiñones y verduras

Este plato es ideal para una comida de fiesta. Un solomillo de cerdo relleno de champiñones y verduras que está para empezar y no parar.

Ingredientes del solomillo de cerdo relleno de champiñones y verduras para 3 personas:

• 1 solomillo de cerdo blanco.
• 1 cebolla.
• 1/2 zanahoria.
• 4 champiñones portobello.
• 250 ml de vino blanco.
• 1/2 cucharadita de harina.
• 100 ml + 1 cucharada de caldo de pollo.
• 2- 3 cucharadas de nata para cocinar (para ajustar la textura de la salsa).
• Aceite de oliva.
• Sal y pimienta al gusto.

Preparación del solomillo de cerdo relleno de champiñones y verduras:

– Pon a calentar a fuego medio una cazuela amplia con un chorrito de aceite de oliva.

– Pela y pica media cebolla y la zanahoria en trozos muy pequeños.

– Cuando el aceite esté caliente, añade la cebolla y la zanahoria y póchalas, es decir cocínalas a fuego muy lento hasta que estén muy bien cocinadas. La cebolla debe quedar transparente y ambas deben estar muy blandas. Tardarás entre 15 y 20 minutos.

– Limpia los champiñones pasándoles un papel húmedo, para retirar cualquier resto de tierra que pudiesen tener y pícalos muy pequeños. Puedes ayudarte del accesorio picador de la batidora para que queden muy muy pequeños.

– Cuando la cebolla y la zanahoria estén listas, añade los champiñones y cocina todo junto unos minutos más.

– Una vez que los champiñones estén cocinados, riega todo con 150 ml de vino blanco y sube el fuego para que se evapore el alcohol. Cocínalo hasta que veas que el vino ha reducido.

– Incorpora media cucharadita de harina y mezcla todo bien añade también una cucharada sopera de caldo de pollo.

– Salpimienta las verduras al gusto y cocina hasta que obtengas una mezcla jugosa pero que no sea líquida.

– Mientras tanto prepara el solomillo, primero debes eliminar la grasa que hay en la superficie y luego tienes que abrirlo. Para ello, coloca el solomillo sobre una tabla y con un cuchillo afilado corta a lo largo a un cuarto del grosor de la carne sin llegar al final de la pieza para que no se rompa, desde ahí vuelve a cortar a lo largo a un tercio del grosor de la carne y, después repite esta misma operación solo que dividiendo la pieza por la mitad. Debes obtener una pieza de carne rectangular de un dedo de grosor (o menos). Es decir, si tienes el solomillo en una tabla a lo largo, debes cortar de la derecha a la izquierda sin llegar al final, después de izquierda a derecha y así sucesivamente. Puedes pedir que te hagan este proceso en la carnicería.

– Precalienta el horno a 180 ºC, calor arriba y abajo.

– Golpea la carne con una maza. Si no tienes, tápala con un film o un papel de horno y golpéala con una sartén.

– Salpimienta muy bien la carne por todas partes y rellénala con la mezcla de verduras y champiñones que has cocinado anteriormente.

– Enrolla el solomillo de cerdo con cuidado de que el relleno no se salga y átalo con una cuerda de cocina. Es importante que lo ates bien para que mantenga la forma durante la cocción.

– Coloca el solomillo en una bandeja apta para el horno y cocínalo en el horno a 180ºC durante 12 minutos.

– Mientras tanto, prepara la salsa. Para ello, pela y pica la otra media cebolla muy fina.

– Pon a calentar una cazuela con un chorrito de aceite de oliva y, cuando haya adquirido temperatura, añade la cebolla y póchala muy lentamente. Es importante que se haga muy poco a poco hasta que esté transparente y muy tierna.

– Una vez lista, riega con los 100 ml de vino blanco restantes y sube el fuego para que reduzca el alcohol.

– A continuación, riega con los 100 ml de caldo de pollo que te quedan u cocina todo junto unos minutos.

– Tritura muy bien la mezcla hasta obtener una crema sin grumos. Cuélala para eliminar cualquier resto que pudiese quedar y devuélvela a la cazuela.

– Cocina todo junto hasta que la salsa tenga la textura que te guste y añade una o dos cucharadas de nata para darle untuosidad a la salsa.

– Cuando el solomillo esté listo, sácalo del horno y déjalo reposar 5 minutos antes de cortarlo.

– Pasado ese tiempo, elimina la cuerda de cocina y corta el solomillo en medallones de 1 cm de grosor, aproximadamente.

– Sirve la salsa de cebolla en la base de un plato y un par de medallones de solomillo por plato y prepárate para disfrutar de un platazo.

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Más información sobre la receta

La mayor complicación que tiene este plato es abrir el solomillo para poder rellenarlo fácilmente, tarea que te puede solventar tu carnicero de confianza sin mayor problema. Si no pudiese ser, con un buen cuchillo afilado y un poco de paciencia se puede hacer sin mucha dificultad. Si lo haces en casa, es fundamental que quede lo más fino posible para poder extender bien el relleno y hacer el rollo posterior.

Por lo demás, se trata de una carne que se rellena de verduras sofritas cortadas muy pequeñas y de champiñones y lo acompañamos de una salsa de cebolla que está para mojarse un par de barras de pan sin despeinarse. No es nada difícil de preparar y el resultado es una maravilla.

Para una comida de fiesta se puede preparar con antelación tanto la salsa como la carne rellena, que se cocina al horno, y el día en cuestión solo hay que calentar la salsa y darle un toque de calor al solomillo. Este tipo de platos nos gustan mucho porque se quedan a falta de montaje y el día que tienes a gente en casa puedes centrarte en los aperitivos y postres teniendo ya el plato principal resuelto.

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